¡Feliz Año Confort!
Esperando ese concierto que unos privilegiados disfrutan cada primero de enero en Viena, tras las campanadas de la Puerta del Sol de la noche anterior, y con la resaca de la cena familiar de la Nochebuena; es decir, entre Pinto y Valdemoro, reflexiono sobre aquello de lo que no puedo dejar de hacerlo: mi sociedad, concretamente sobre algo que últimamente oigo a menudo: la zona de confort.Leer más »¡Feliz Año Confort!